Se le conoce sólo por su apellido, Fonseca. El cantautor bogotano era apenas un adolescente en la decada de lo 90 cuando la industria de la música estaba formando a otros artistas colombianos también conocidos por un sólo nombre; Shakira y Juanes. Y el joven emergente no acababa de salir de la universidad cuando fue invitado para actuar en calidad de telonero para estas mismas superestrellas, quienes podrían haber sido sus hermanos mayores.
Hoy, Fonseca es uno de sus exitosos colegas, compartiendo los primeros puestos de las listas y del escenario mundial como uno de los artistas más popularesde su país con una aclamación mundial creciente. Este talento de 30 años es la nueva figura de una revolución musical que inicio cuando el era aún un niño, una arraigada en las ricas tradiciones de la música folclórica-- específicamente el vallenato, esa alegre música costeña donde predomina el acordeón--pero modernizada con la vitalidad del rock y las guitarras eléctricas.